20190210

Puerta cerrada

Tenía razón con sus pulgares escondidos cuando vaticinó un máximo de sesenta días. Porque no hay posibilidad de ser soportable más tiempo. Y como dice desde hace tiempo ya, ahora entiende su soledad. Totalmente provocada. Justa consecuencia. Eso sí, no entiende tanto revés. Ni qué necesidad pudo ocultar. Pero que se la quede. Que a ella ya no le interesa. Sólo le regala portazo y un adiós con la mano. Porque ella al menos sabe de educación. Será que dos años marcan la diferencia. O no. Será que ni con los años podrá alcanzarla. Que más da. 

Bye bye.

No hay comentarios:

Publicar un comentario